Una de las alumnas que tuve en mi último
workshop sobre creatividad vectorial me comentaba que iba a usar el programa Illustrator para pensar sus pinturas, las pinturas que venia haciendo con sus técnicas
tradicionales. Es cierto que sus pinturas ofrecen una estética muy propicia
para ser trabajada desde el ordenador. Se había dado cuenta que el ordenador le
ayudaba a pensar con tranquilidad, que le permitía decidir, seleccionar, analizar
y cambiar. Una vez pensado en el programa, decía, ya veré si lo imprimo desde
el mismo programa o si me sirve de esbozo para las pinturas.
Me alegré de oír de alguien esa iniciativa, el
hecho de usar la máquina como ayuda para el pensamiento, incluso de esbozo.
Venimos oyendo que el ordenador nos quita el
concepto, no nos deja pensar, y nada más lejos de la realidad, creo que
entender el trabajo digital es en parte darse cuenta de ello.